Sin duda salir del país de origen y conocer nuevas culturas, lugares, personas e idiomas, es una experiencia que muchos quieren vivir. Actualmente, algunos países no exigen visa para estar dentro de su territorio, lo que indica que las opciones para los medellinenses son variadas.
No obstante, a la hora de planear un viaje al extranjero se deben tener varias cosas previstas, una de ellas es el objetivo del viaje, pues de esta manera se podrán sortear los aspectos legales. Dependiendo del destino y su propósito, el tema monetario entra a ser un aspecto relevante.
Viajar con fines turísticos, académicos, de negocios o de trabajo son opciones universalmente concebidas, pero que conllevan sus propios desafíos. Hay otras formas alternativas, muy similares a las anteriores, pero suponen otros aspectos.
Presentamos estas otras formas para viajar alrededor del mundo.
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SER AU PAIR
Es aquella persona que es acogida temporalmente por una familia de otro país, tradicionalmente, para el cuidado de sus niños. Esta modalidad es bastante usual y una de las maneras más seguras de ir al extranjero. Muchas agencias trabajan a través de plataformas virtuales en las que se puede encontrar toda la información referente a las postulaciones, requisitos y trámites necesarios para ser una au pair en cualquier parte del mundo.
APLICAR A UN VOLUNTARIADO
Ser voluntario es colaborar en un proyecto extranjero que sea afín a los intereses de quienes se postulan y en el que los participantes aportan con sus habilidades a una comunidad. Aunque este mercado no es tan amplio, sí hay entidades privadas que tienen como objetivo enviar personas a realizar misiones.
ACCEDER A UN INTERCAMBIO ACADÉMICO
Los intercambios académicos se dan propiamente entre universidades, los cuales están sujetos a condiciones exigidas por el país y la academia en particular. Por lo general, los universitarios pueden realizarlo cuando han superado cierta cantidad de créditos o semestres cursados. Es una de las mejores opciones para viajar y aprender otro idioma.
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ACCEDER A UN INTERCAMBIO DE HOSPITALIDAD
Esta es una modalidad para aquellas personas aventureras que fácilmente se podrían adaptar a vivir en una pieza, casa o algún espacio que un nativo de un país quiera compartir. El viajero, a cambio, ofrecería algún tipo de beneficio cultural como cocinar comida típica su país o enseñar su idioma. Para esta modalidad existen varias plataformas a nivel mundial, unas gratuitas y otras con ánimo de lucro, que permiten acceder a la base de datos de aquellas personas dispuestas a aceptar huéspedes.
RECURRIR AL MATRIMONIO
Casarse e irse a vivir a otro país no es mala idea y realmente puede funcionar. Emparejarse con alguien de otro país permite que, después de algún tiempo y luego de cumplir los requisitos exigidos por la ley, se pueda obtener la residencia y, eventualmente, la nacionalidad.
Lo bueno también de todas estas opciones es que permiten al viajero aprender el idioma que elija, ya sea inglés, francés, italiano o alemán, pues más allá de todo, al salir del país, hay una inmersión puramente cultural.
