Luego de cinco años, la banda americana Red Hot Chili Peppers publicaron su nuevo trabajo discográfico “The getaway”, un álbum que al igual de tener ritmos acelerados y fuertes, se percibe cierto aire melancólico.
Este disco es el número 11 en 22 años de carrera artística y el primero en no ser producido por Rick Rubin, quien venía trabajando con ellos desde hace ya varios años, y en esta ocasión prefirieron trabajar Danger Mouse (Brian Burton) quien decidió incluir más teclados de los que habitualmente se podían encontrar en un disco de los Peppers.
Pero en este disco no se pierden ni se abandonan elementos que son distintivos de esta agrupación, pues son una marca y deben estar presentes, desde las menciones a California, los buenos riffs, que componen un bajo extraordinario y las letras e interpretación rítmica de Anthony Keidis continúan estando presentes en este disco.
Al comenzar a escuchar los primeros acordes en su canción «The Longest Wave», el track número cuatro del disco, se podría pensar que John Frusciante está de vuelta en el grupo después de su retirada del mismo en el 2008, pero no, es Josh Klinghoffer quien ha estado compartiendo con el grupo oficialmente y al frente de las 6 cuerdas desde el año 2009, logrando una interpretación notable de su instrumento.
El disco es una montaña rusa en la que subes y bajas, lleno de emociones, por ejemplo, las canciones que se podrían considerar más “pesadas” se pueden percibir en el final del disco, guitarras que recuerdan al gran Jimmy Hendrix, encaran “Detroit”, canción en la que hacen referencia a diferentes artistas provenientes de esta ciudad que influyeron de una manera espectacular en la historia de la música como lo son The Stooges, Funkadelic, J Dilla y Henry Ford, mientras también te envuelven con interludios y canciones más amables que ofrecen un respiro como en «This Ticonderoga».
Tambien ofrecen canciones un poco más felices, con un invitado en el piano inigualable como lo es Elton John, quien fortalece «Sick Love», la cual toma parte de su melodía de «Bennie and the Jets», mientras que «Dark Necessities», el primer sencillo del disco, podría ser un poco más similar al de Duran Duran de finales de la década de 1980 y «Go Robot» es como si los RHCP entraran en el territorio de los mismísimos Daft Punk.
Con este disco los californianos Red Hot Chili Peppers toman algunos riesgos y se mantienen de pie en «The Getaway», demostrando que el tiempo no sólo está en sus cuerpos expuestos a la edad sino también en sus mentes.
LOS PRIMEROS PASOS AL IDIOMA:
Los Red Hot Chili Peppers, podrían ser una de esas agrupaciones que acercaron a muchos a lenguas extranjeras pues, quién no recuerda canciones como “Californication” de su séptimo trabajo discográfico que nos hizo tararear la canción una y otra vez a algunos siendo muy pequeños y otros no tanto.
Teniendo esto en cuenta, buscar una academia de inglés en Medellín no es una opción, es una obligación. La música y las artes a veces tienen un idioma, que en la mayoría de los casos es el inglés, la única solución es aprenderlo y practicarlo constantemente.
A pesar de que la agrupación ha estado en el territorio colombiano un gran número de veces, nunca es tarde para asistir a una academia de inglés en Medellín, pues al adquirir o fortalecer conocimientos en una lengua extranjera, se podrán disfrutar aún más las presentaciones de estos íconos musicales.